La Comisión ha propuesto, el 16 de junio, nuevas normas para ayudar a los consumidores a tomar decisiones informadas y sostenibles a la hora de comprar teléfonos móviles e inalámbricos, y tabletas, en virtud del actual Reglamento de etiquetado energético de la UE. Esta nueva propuesta llega el mismo día de la aprobación de medidas para hacer que estos dispositivos sean más eficientes desde el punto de vista energético, duraderos y fáciles de reparar por parte del Parlamento Europeo y el Consejo, tras una propuesta de la Comisión en noviembre de 2022, en virtud del Reglamento de diseño ecológico de la UE.
Estas medidas ayudan a que la economía de la UE sea más circular, ahorrar energía, reducir nuestra huella de carbono, apoyar modelos de negocio circulares y ofrecer los beneficios del Pacto Verde Europeo a los consumidores.
Los teléfonos móviles y las tabletas producidos de acuerdo con estas reglas ahorrarán casi 14 teravatios hora en energía primaria cada año para 2030. Esto es un tercio del consumo de energía primaria de estos productos en la actualidad. Las nuevas normas también ayudarán a optimizar el uso de materias primas críticas y facilitarán su reciclaje.
En virtud del Reglamento sobre etiquetado energético propuesto hoy, los teléfonos inteligentes y las tabletas comercializados en la UE tendrán que mostrar información sobre su eficiencia energética, la longevidad de la batería, la protección contra el polvo y el agua, y la resistencia a las caídas accidentales. Esta es también la primera vez que un producto introducido en el mercado de la UE deberá mostrar una puntuación de reparabilidad. Esto ayudará a los consumidores de la UE a tomar decisiones de compra más informadas y sostenibles y fomentará el consumo sostenible.
Los nuevos productos utilizarán las etiquetas energéticas de la UE existentes y conocidas en escala A-G, y la base de datos a escala de la UE European Product Registry for Energy Labels (EPREL) proporcionará información adicional sobre el producto.
Además, el Reglamento sobre diseño ecológico recientemente aprobado establece requisitos mínimos para los teléfonos y tabletas móviles e inalámbricos que se comercializan en la UE, entre ellos:
- Resistencia a caídas o arañazos accidentales, protección contra el polvo y el agua y uso de baterías suficientemente duraderas. Las baterías deben soportar al menos 800 ciclos de carga y descarga, conservando al menos el 80% de su capacidad inicial.
- Normas sobre desmontaje y reparación, incluidas las obligaciones de los productores de poner a disposición de los talleres de reparación piezas de recambio esenciales en un plazo de 5 a 10 días laborables, y hasta 7 años después del final de las ventas del modelo de producto en el mercado de la UE.
- Disponibilidad de actualizaciones del sistema operativo durante períodos más largos: durante al menos 5 años después de que el producto se haya introducido en el mercado.
- Acceso no discriminatorio para los reparadores profesionales a cualquier software o firmware necesario para el reemplazo.
Próximos pasos
Estas normas de etiquetado energético se presentarán ahora al Parlamento Europeo y al Consejo para un período de control de dos meses, tras el cual se adoptarán formalmente si los colegisladores no se oponen al texto.
Para armonizar la entrada en vigor de estos dos actos legislativos relativos a la misma categoría de productos, su publicación en el Diario Oficial tendrá lugar el mismo día, tras la adopción de las normas de etiquetado energético.
Tras su entrada en vigor, ambas propuestas prevén un período transitorio de 21 meses antes de que los requisitos sean aplicables.
Fondo
El Plan de Acción para la Economía Circular 2020 tiene como objetivo garantizar que los productos sean más duraderos, reparables y fáciles de actualizar. En concreto, la Circular Electronics Initiative prevé medidas reglamentarias en virtud de la Directiva sobre diseño ecológico para la electrónica y las TIC, como teléfonos móviles, tabletas y ordenadores portátiles, de modo que dichos dispositivos estén diseñados para la eficiencia energética y la durabilidad, la reparabilidad, la capacidad de actualización, el mantenimiento, la reutilización y el reciclaje.
Las políticas de diseño ecológico y etiquetado energético ayudan a las empresas, los ciudadanos y los gobiernos a contribuir a la transición hacia una energía limpia, cumplir los objetivos de eficiencia energética de la UE, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero 0 y apoyar la economía circular. Crean oportunidades de negocio y aumentan la resiliencia mediante el establecimiento de normas armonizadas para los productos relacionados con la energía. Estos incluyen, en particular, electrodomésticos medianos y grandes, como lavadoras y refrigeradores, y productos de empresa a empresa, como servidores empresariales y unidades de ventilación, y cubren aspectos como el consumo de energía, el consumo de agua, los niveles de emisión de GEI y la eficiencia de los materiales. Estas medidas también fomentan la demanda y la oferta de productos más sostenibles, al tiempo que reducen significativamente los costes para el usuario final; Las estimaciones indican que los consumidores ahorraron más de 63.2020 millones de euros en <> gracias a estas políticas.
Para más información
Reglamento de la Comisión por el que se establecen requisitos de diseño ecológico para los teléfonos inteligentes, los teléfonos móviles distintos de los teléfonos inteligentes, los teléfonos inalámbricos y las tabletas de pizarra
Reglamento Delegado de la Comisión relativo al etiquetado energético de los teléfonos inteligentes y las tabletas de pizarra
Directiva sobre diseño ecológico
Reglamento sobre etiquetado energético
Plan de Acción para la Economía Circular 2020
Registro Europeo de Productos para el Etiquetado Energético (EPREL)